Con las matemáticas dándole esperanzas de clasificación, los Rayos encaran con ilusión al Guadalajara que aspira a trepar en la clasificación de cara a la Liguilla del Clausura 2017
Los Rayos del Necaxa han hecho hasta lo imposible por aislarse del ruido que los ataca, que no es poco, y limitarse a escuchar el susurro de las matemáticas, el cual les confirma la existencia de la posibilidad de clasificar a la Liguilla del Clausura 2017, si vencen a las Chivas.
Para este fin, y bajo el marco de la jornada 17, la última, del presente torneo de la Liga MX, los hidrocálidos se citan con el Rebaño Sagrado en el Estadio Victoria. Contendientes que atraviesan momentos dispares.
Para acceder a la Liguilla, los en su momento conocidos como “11 hermanos” necesitan un triunfo, obligatorio, ante los Rojiblancos y posteriormente esperar, preferencialmente, por caídas de León, Veracruz, Pachuca, Morelia y Tigres. Una victoria de los 4 últimos les quita la vida inmediatamente.
Mientras Necaxa hace cuentas y rezos para alentarse a confiar en clasificar a la Liguilla, el Guadalajara es uno de los confirmados de la Fiesta Grande del Futbol Mexicano. Sin embargo, es un hecho que sufre una baja en su nivel futbolístico; peligrosa por el momento en el que llega.
El equipo de Alfonso Sosa tuvo un torneo para el olvido. De aquellos electricistas que sorprendieron a la Liga MX en su vuelta al Máximo Circuito nada quedó. Tras 16 partidos suma solo 5 triunfos, igual número de empates y 6 derrotas: 20 puntos, por 26 que sumó 6 meses atrás.
Es un hecho que su prematura salvación del descenso se debió en buena parte a su cosecha anterior. A tal grado fue el impacto que el Apertura 2017 lo iniciarán en el décimo lugar de la porcentual.
Quizá el punto a favor del Necaxa en este momento, y que más lo ilusiona con poder colarse a la Liguilla, es que se presenta ante Chivas con su mejor racha en el Clausura 2017: 3 triunfos en fila, ante Veracruz, Morelia y Puebla.
No obstante, los Rayos necesitarán un mucho mejor desempeño que el mostrado ante la Franja para aspirar a competir con garantías con Guadalajara: fueron superados ampliamente en la tenencia de la bola, generaron escasas ocasiones de gol y el tanto que marcaron fue circunstancial.
Por su parte, Chivas aterriza en Aguascalientes con 4 partidos sin ganar, 2 de ellos con derrota incluida y apenas 1 par de goles anotados. Escenario preocupante que lo llevó a certificar su pase a la Liguilla hasta el partido pasado, en el cual igualó con León en Jalisco.
El sistema de juego de Matías Almeyda se ha visto duramente golpeado por las lesiones. Isaac Brizuela, Ángel Zaldívar, Rodolfo Pizarro, Jair Pereira, Carlos Cisneros y, recientemente, Edwin Hernández están fuera de combate; todos ellos titulares indiscutibles o con altísimo potencial para serlo.
Muy pocas plantillas, en el mundo, no solo en México, pueden tener sustitutos de la misma categoría para tantas bajas. Evidentemente eso ha mermado el funcionamiento del Rebaño, en conjunción con un disminución en el nivel de algunos otros elementos.
Ante esta disyuntiva, y quizá con la certeza de que la Liguilla era un logro amarrado, a pesar de la demora en el cierre del proceso, el “Pelado” ha tenido que poner en marcha planes de emergencia con el afán de encontrar soluciones.
Tales como la habilitación de Orbelín Pineda como mediapunta, Néstor Calderón como un volante mixto, Carlos Fierro de centro delantero y los minutos dados a los juveniles Michelle Benítez, Mauro Contreras y Edson Torres.
Con este condicionante, Chivas debe sacar todo el brillo que tenga para afianzar de nuevo su funcionamiento, tanto en fase de defensa como de ataque, y apuntar por un triunfo ante Necaxa, que le serviría como catalizador anímico y estadístico, pues podría trepar incluso al liderato, para desde ahí, pelear con mayores beneficios en la Fiesta Grande.
Fuente: Televisa Deportes
1 Comentarios
Ya le pueden decir adios ala liguilla
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