Opinión PR | El que quiera azul celeste...

Por Rafael Vera.

@rafaelverasa

Saludos a todos la comunidad PR. Los días pasan y los Necaxistas nos frotamos las manos por qué ya empiece el nuevo torneo, expectativas por la llegada de Nacho Ambriz se han generado y todos esperamos que se cumplan y que Necaxa retome el protagonismo que se tuvo antes de los descensos.

La semana pasada a todos los abonados nos llegó la comunicación por parte del Club para adquirir los abonos de la temporada 2017-2018 en preventa. Si bien es cierto que por las condiciones económicas que han imperado en el país (alza en precios de todo y tasas de interés, volatilidad del tipo de cambio y la convergencia en el precio de la gasolina a su precio real) se esperaba un alza importante en el costo de los abonos, la subida de más del 40% en casi todas las zonas nos tomó por sorpresa.

Sí, muchos dirán que si lo compras antes de mayo 31 tienes muy buenas promos; pero si no tienes la liquidez para hacerlo, los precios a los que se tendrían que comprar los pases anuales son algo elevados. Sin embargo, ¿son realmente justificados los reclamos?

Desde mi punto de vista, si bien es cierto que los precios de estos abonos son en gran medida injustos para aquellos que hacemos el gasto y el esfuerzo de ir cada 15 días al Estadio y presagian un costo de entre 300 y hasta 1,000 pesos por localidad en el Estadio, los costos operativos y de mantenimiento en el Estadio Victoria se deben cubrir y para eso hace falta dinero.

Curioso es que quienes más se quejan del alza de los precios son aquellos Necamillenials que no van al Estadio y solo piden links para ver los juegos. Esos a los que "ningún chile les embona" y que estarán reventando a Ambriz en cinco fechas. De voz de muchos aficionados abonados he oído que, si bien es cierto que no les encantó el alza, están haciendo el esfuerzo por comprar los pases para apoyar al Rayo.

Eso sí, en contra de esta medida, el mayor riesgo y/o error, tiene que ver con el arraigo que poco a poco y a pulso habían conseguido los Tinajero para Necaxa. Esto porque habrá que ver qué opinan los padres de familia, que si bien son Chivas o Águilas seguramente, también son los que pagan los abonos para sus familias, donde sus niños son Rayitos y Centellitas. Esta alza de precios puede ser un duro golpe al cariño de estos nuevos aficionados. No de balde se dice que cuando las dificultades económicas tocan a la puerta, el amor (en este caso por el Rayo), se sale por la ventana. En defensa del Club, hay que ver si con la ampliación de la zona gol basta para apoyar la economía familiar.

Así las cosas, seamos sinceros, las finanzas de un equipo de fútbol no se sostienen con las entradas, es con los patrocinios, derechos televisivos y transferencias de jugadores (pregúntenle a Chivas o Pachuca); pero la taquilla y el consumo in situ sirven para los costos operativos y de mantenimiento y el gasto corriente de los clubes. No queremos azul celeste y que nos cueste; pero si queremos un reluciente Rojiblanco, hay que hacer uso de las cuentas de banco. Fuerza Rayos y nos leemos pronto.

Vale por un tweet: "Nadie tiene la culpa de que Edson justificadamente quiera ganar más; pero tampoco tenemos la culpa de que el wey se haya vendido mal"